Punta Piedra y Punta Vacas los sitios más afectados por la socavación
Entre hoy y mañana se enviarán las ayudas que se requiere para la atención de estas personas.
En reunión con la comunidad de Punta Piedra, en Turbo, El DAPARD estableció con ellos una serie de medidas frente a la socavación en la zona, que llega ya a 300 metros de pérdida de playa y 40 viviendas que se ha llevado el mar. Así lo explica John Fredy Rendón Roldán, Director del Departamento Administrativo del sistema de Prevención, Atención y Recuperación de Desastres.
El socavamiento es bastante progresivo, señala Rendón Roldán quien afirma que además de los daños mencionados, ya tiene en peligro la base aérea, el aeropuerto y otros sitios de importancia para la comunidad como vías importantes y otras viviendas. Por eso vamos a iniciar un proceso para adelantar algunas gestiones que nos permita conseguir recursos, porque las obras de mitigación que se requieren reportan una inversión entre 20 y 25 mil millones de pesos.
Los sitios de mayor afectación son Punta Piedra y Punta Vacas. En tanto en el corregimiento de Zapata, en Necoclí se adelanta unas obras de mitigación, según lo informa Rendón Roldán que como los espolones ayudan a proteger las costar de la erosión y en Arboletes se va a iniciar un proceso de ejecución de 18 mil 500 millones de pesos que a través de la Gobernación se han destinado para este fin. En este sitio, la zona de Punta de Rey es la más afectada con pérdida de terreno que ya llega a 1.000 metros de costa perdida.
Es importante señalar que por la intensidad y la fuerza de las olas del mar estas obras son, por estudios adelantados por la Dirección General Marítima DIMAR, la Gobernación y algunas entidades que tiene que ver con el tema, la medida que puede ayudar a prevenir la socavación, por ello, se piensa en la construcción de espolones y de puertos que permitan la protección de las tierras y el acceso al uso de la plataforma marina.
Por lo pronto, señala John Fredy Rendón, director del DAPARD, se están entregando las ayudas humanitarias para la atención de las familias afectadas, que constan de 500 láminas de Eternit, algunos bultos de cemento y materiales que se requieren para reparar las viviendas afectadas como los enseres e insumos que permiten atender a estas personas.
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